Durante este curso mi función en el blog del compromiso de los jóvenes con la salud ha sido la de informar sobre ciertos hábitos y enfermedades y, principalmente, la de desmentir la enorme cantidad de bulos que andan corriendo por nuestra sociedad acerca de lo relacionado con la salud.
La gran cantidad de mitos que van corriendo de boca en boca se ha visto multiplicada, sobre todo, por Internet, donde la gente habla sobre cosas de las que no tiene conocimiento.
Estos mitos pueden tener consecuencias muy negativas en los jóvenes, ya que muchos de ellos consisten en suavizar verdades o incluso negarlas, incitando a la gente a actuar de una manera que, muy probablemente, acabará dañando seriamente su salud.
Por esto es necesario que la gente, y sobre todo los jóvenes por ser más inocentes en estos temas, se conciencie de la importancia de saber discernir la fiabilidad de las fuentes que les aportan la información.
Por otro lado, también he tratado un tema que para mí ha tenido bastante importancia, y es el de los mitos de las enfermedades mentales, los cuales proporcionan una visión errónea de estos enfermos en la sociedad, lo cual contribuye a su marginación y exclusión, agravando su situación aún más si cabe.
Otras cuestiones “de moda” sobre la salud también han sido analizadas, como el famoso problema de la anorexia, o la preocupante precocidad de los jóvenes en el consumo de drogas “blandas”, que en algunos casos (no en la mayoría) desembocan en una drogadicción a las drogas “duras”, teniendo España el privilegio de contar con los más altos puestos en el consumo de cocaína.
En conclusión, mi intención ha sido llevar a mis compañeros en cada exposición a conocer algunas curiosidades sobre la salud o cuestiones que han de saber, lo cual me ha servido a mi mismo para aprender en el camino.
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